Lejos de la genial y mítica "Blade Runner", la película de Denis Villeneuve es una buena película. Le falta el alma, el aliento poético que le dio misteriosamente Ridley Scott, ese toque especial, mágico e intransferible. Pero muy lúcida es su diagnóstico de la condición humana: "Todos deseamos un atisbo de verdad".
Treinta años después de la primera versión, Los Ángeles sigue sumida en un infierno climático, donde la noche eterna mantiene pantallas publicitarias atrayentes cada vez más reales. Un joven Blade Runner (K, Ryan Gosling) tendrá que localizar a su escondido colega (el viejo Rick Deckard, Harrinson Ford) porque en él están las claves de este Apocalipsis.
Pero vayamos a las cosas positivas de esta gran película:
* La fotografía ( Roger Deakins ) es sencillamente espectacular, hipnótica, crepuscular.
* El guión es perfecto, jugando con el espectador hasta el final de la película. Todas las piezas encajan en un rompecabezas fantástico.
* La banda sonora ( Hans Zimmer y Benjamin Wallfisch ) es una continuación de la obra maestra de Vangelis.
* La actuación de Ryan Gosling (K) y Ana de Armas (Joi) que desprenden amor verdadero, pese a ser una relación entre un replicante y un holograma.
* Los decorados y los efectos especiales son inmejorables durante toda la historia, impecables, colaborando en la atmósfera de desolación total de nuestro querido planeta.
Escenas apreciables:
* La caza del replicante en su granja retirado del mundo y conformándose con una vida sencilla (criando gusanos como proteínas). "Que fácil es matar cuando no se ha visto un milagro".
* La impresionante simbología del árbol muerto donde yace enterrada Rachael. Cerca de la raíz estará la famosa fecha 6.19.21.
* La escena de amor y sexo entre K y la extraña unión resultante de la replicante con Joi. Por fin podrán abrazarse y besarse físicamente.
* El nacimiento saliendo de la bolsa amniótica de una mujer ante el malvado Niander Wallace (Jared Leto), creador de replicantes. Quiere ser un Dios pero no consigue que den vida. Busca desesperadamente esa criatura nacida de un hombre ( Deckard ) y una mujer replicante (Rachael).
* Todas las escenas de acción dentro del caótico cementerio de basura radioactiva donde malviven la escoria humana. La poderosa Luv (Sylvia Hoeks) salvará a K de morir irremediablemente desde su sede mientras le hacen la manicura.
* El recuerdo implantado de la huida del niño para esconder y proteger a su caballito de madera.
* La burbuja en la que está encerrada la mejor creadora de recuerdos que será una caja de sorpresas. Fascinante su imaginación.
* La tregua entre K y Deckard con Elvis Presley de por medio. "Esta canción me gusta". Momento antológico del sentido del humor en la historia del cine fantástico.
* Lucha a vida o muerte entre K y Luv, dos prodigios de fuerza y resistencia ante la mirada incrédula de un Deckard maniatado en la nave y a punto de morir ahogado. "La mejor ángel soy yo"·
* El autohomenaje de Edward James Ommos como Gaff en su residencia de ancianos, ya octogenario. Grandeza de un policía legendario.
* El final sin diálogo con K tumbado sobre la escalera nevada, satisfecho de haber muerto con dignidad, por los suyos. "Es lo mejor que puede hacer uno en la vida".
En definitiva, no duden y vayan a ver esta maravilla de la ciencia ficción. Les dará mucho que pensar. Y encima no tendrán que desplazarse de Sanlúcar. Aprovechen. SALUD.
P.D. Simpático el perro negro del viejo Deckard a quien le gusta el whisky. "Tengo millones de botellas". Dejaré para otra entrada las inquietudes filosóficas que aporta la película.
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