El suspendido (de empleo y sueldo) inspector, Milo Malart, es reclamado desde la Comisaría Central para ayudar en la investigación de un posible psicópata que ha quemado vivo a un alcaldable (Eduard Pinto), en la fachada de la Casa Milà, más conocida como La Pedrera.
"- Sí, en el centro, en la mismísima milla de oro de Barcelona, y en un edificio de Gaudí. Es demencial. ¿Quién puede haber hecho una cosa así? Algún chiflado, sin duda. Nadie en su sano juicio se tomaría tantas molestias para matar a un ser humano"(14).
El GEHME (Grupo Especial de Homicidio de los Mossos d´Esquadra) irá descubriendo que alguien lleva matando personas desde el 10 de junio de 1991 -recuérdese que Gaudí murió el mismo día en 1926, atropellado por un tranvía, y que no fue auxiliado hasta que llegó Ramón Pérez Vázquez, paisano de Pobra do Caramiñal donde estoy pasando las vacaciones -.
Pero antes, aparecerá otro cadáver calcinado: Félix Torrens (presidente del Círculo Gaudí, miembro del Consejo de la Fundación Catalana y de una conocida familia de la alta burguesía). Mucha porquería irá saliendo a la superficie: fraude, malversación de fondos, tráfico de influencias, expropiaciones traumatizantes, abusos de menores en centros de acogidas,..., un auténtico "estercolero humano".
"Para él, Barcelona es un parque temático del horror; y Gaudí, su atracción de feria más insignes para los turistas. Ignoro los motivos, pero todo señala que ambos, la ciudad y el arquitecto, son las víctimas que subyacen detrás"(362).
Las sorpresas se irán sucediendo, una tras otra, hasta la apoteósis final. No adelanto más.
Datos de nuestro inspector:
* natural de Barcelona;
* huérfano de madre a los seis años, fue criado por sus abuelos;
* tiene un hermano tres años mayor;
* estudió derecho en la UB y en la Academia de Mollet;
* tiene una intuición especial para resolver los casos. "Y ahí es donde me haces falta. Necesito tu cabeza, tu maldita parabólica" (18);
* está separado de Irene Margarit, hija única de uno de los principales industriales textiles de la ciudad;
* sufre por el suicidio (con su pistola) de su sobrino Marc. "Pero utilizó mi arma, Susana. Y tendría que haberlo detectado. No hay perdón"(27);
* no traga a la alta burguesía;
* tiene un coche viejo y abollado, un Volkswagen;
* "sólo me verás con traje el día de mi entierro"(547).
Personajes importantes:
* su nueva compañera, la subinspectora Rebeca Mercader, venida de Gerona, del Área Técnica, especialista en Análisis de la Conducta Criminal. Será su alma gemela, de las desconfianzas iniciales pasarán a la amistad eterna.
* Susana Cabot, jueza de instrucción de Barcelona, buena amiga de nuestro inspector, excelente amante y un halcón en su trabajo. Lo pasará muy mal al final de la novela, terriblemente mal. "Si algo la caracterizaba era el dominio del sentido común sobre el corazón"(27).
* el jefe Singla, quien, a pesar de las grandes diferencias entre ellos ("en nuestro último encuentro acabó con el pómulo fracturado"-19-), terminará haciendo caso a Milo.
* Irene, "Larga cabellera rubia y ensortijada, boca sensual, grande y ojos azules, cristalinos. Delgada, bronceada. Clase, dinero, belleza. Una explosiva combinación. Su mujer. Su ex mujer"(207).
* el jefe Benet Bastos, proveniente del mundo de la política, no está considerado un hombre de la casa. " Una de sus características más acusada era la suspicacia permanente. Con todos y con todo"(32). "-¿La verdad? Esto es una comisaría, no un confesionario"(111).
* la psicóloga, Judit Gaig, que le dará una de cal y otra de arena. "Todos tenemos un umbral de dolor emocional, y usted ya ha sobrepasado el suyo"(33).
* el inspector Bachs, con quien estudió en la Academia, se licenciaron juntos y formaron equipo hace años. Duda si es el topo de la comisaría.
* el periodista televisivo, Mauricio Navarro, con muy pocos escrúpulos. "La vida era maravillosa. No podía juzgar su trayectoria sin catalogarla de éxito total, abrumador"(490). Final dantesco.
* el experimentado forense jefe, Goyo Bonhora, obeso, de baja estatura y cuidada barba que parece contrarrestar su cada vez más escaso cabello. "Como dice el viejo aforismo de la profesión, no existe el crimen perfecto, sino la investigación imperfecta"(120). "No procuro saber las respuestas, procuro comprender las preguntas"(360).
* Virginia Colomer, esposa de Félix Torrens. "Según él, la grandeza de un hombre se mide por la categoría de sus enemigos. Y les garantizo que, por esta regla de tres, mi esposo es de una grandeza deslumbrante"(146).
* el sargento, Toni Crespo, de talante sereno, metódico, con una tranquilidad a prueba de bombas.
* Eugeni Gombrowicz, bibliotecario, especialista en movimentos masónicos.
* Kata, la chica de Marc. "Joder tía, era mucha pasta. Mil por una paja, mil quinientos con la boca y dos mil por un polvo. Les ponía que tuviera catorce años. No sé"(408).
* Emilio Vilaplana, el hombre que había guiado la carrera de nuestro inspector, promoviéndole a los sucesivos ascensos hasta llegar a inspector. "Sigo pensando que un policía que no bebe de vez en cuando es, cuanto menos, sospechoso"(502).
* Eva Messeguer, pedagoga en la casa de acogida en Reus, La Ferradura.
Reflexiones filosóficas de Milo:
* "Para él, era otra más de las paradojas de Barcelona. Soledad y aislamiento dentro de una orbe donde la necesidad de llenar el vacío era una urgencia prioritaria. Cualquier cosa menos la nada. La ciudad entera pedía a gritos el contacto humano, y sin embargo, era el dominio de la soledad y el recelo al prójimo"(47).
* "Matar es difícil; hace falta fuerza interior, aunque sea por venganza. Mucha fuerza interior y determinación. Y no está al alcance de cualquiera. Nadie se pone a matar así como así"(139).
* "Mi abuelo era pescador, sabía leer el cielo y calar a la gente con un golpe de vista. Me educó para tomar mis propias decisiones. Y no, no tuve vocación. Fue sobre la marcha"(168).
* "Lo más curioso es que todo esto se viene repitiendo cíclicamente. Hace más de un siglo, la Barcelona anarquista enfrentada a Barcelona burguesa. Y hoy, ocurre otro tanto. Los tiempos cambian, pero las cosas siguen igual. Y mientras, la gente como nosotros asiste muda al espectáculo. Sólo somos extras en la función, Susana. Material de relleno. Simples marionetas."(297).
* "Fueron expropiados, y eran menores. Este fue el detonante de todo. La ciudad, ante sus ojos, fue la culpable. La que inició su descenso a los infiernos. Y allí, en La Ferradura, se encontraron con el mismísimo demonio: Félix Torrens. Ese monstruo acabó de arruinar sus vidas, de averiar sus cerebros. Mató sus espíritus a conciencia. Eduard Pinto, Félix Torrens y Barcelona, tres objetivos de su odio"(467).
* "Somos emoción, estamos enganchados a ella como si fuera una droga. Emoción por las cosas, por las personas, por una ciudad. Pero nuestros asesinos carecen de espíritu. Ese monstruo los anuló como seres vivos. Se la arrebató. Y desde entonces actúan como autómatas, sin sentimientos. Ya no son humanos, ahora viven como máquinas. Están muertos, y lo saben"(495).
* "Ha pasado por las cinco fases de la muerte, de lo que ella consideró como su muerte. Negación, ira, negociación, depresión y aceptación; en este caso, sumisión"(529).
P.D. Termino con un diálogo de época clásica y con un epílogo real como la vida misma.
* "- No sabía lo que sé ahora, y me costó el puesto.
- ¿Y qué sabes ahora?
- Que hay muy pocas cosas por las que valga la pena arriesgar el cuello.
- Has cambiado.
- Me he hecho viejo"(503).
* "El verdadero misterio del mundo es lo visible, no lo invisible" (Óscar Wilde). SALUD.
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