Calle GRANA

ANXO tenía ganas de meterse en la calle GRANA. 
 

Hermana del CALLEJÓN VISTA ALEGRE.

Según me comenta una vecina todas las viviendas estaban vendidas a un constructor pero finalmente no se llevó a cabo.

Llama la atención la tranquilidad que se respira.

Siempre he pensado que la necesidad enseña más que la universidad.

La mejor casa guarda un vergel como auténtico tesoro.

La calle es un verso libre entre tantos edificios modernos.

Termina en patio muy curioso. SALUD.

Ola de calor

 

Con este calor solo queda refrescarse como podamos.

Recibimos a unos amigos en el HOTEL GUADALQUIVIR.

El aire acondicionado del MUSEO MANOLO SANLÚCAR es idílico.

La hora de estancia es sugerente.

Los paseos con ANXO han pasado a las ocho de la mañana.

A las doce todos para casa.

Ojalá bajen un poco las temperaturas.

Un nuevo y simpático amigo de ANXO. SALUD.

Callejeando con ANXO

 

Cuando no hace tiempo de playa, ANXO, me ayuda a recorrer algunas calles de Sanlúcar que no conocía.

La calle EL AVIADOR es habitual en mis paseos.

Nunca llegué hasta el final de la calle SOLEÁ.

La calle PETENERAS termina en una parcela con pozo. SALUD.

ANXO me lleva por calles desconocidas

ANXO tiene alma de investigador.

Está consiguiendo que profundice en el callejero de SANLÚCAR.

Bajo de Guía esconde rincones curiosos.

Es un urbanismo diferente.

Pertenece a la SANLÚCAR profunda.

Es algo diferente en pleno siglo XXI.

La necesidad enseña más que la universidad.

Y siempre surgen detalles de belleza.

La Plaza de Malandar es una caja de sorpresas.

ANXO incluso hizo un amigo.

Cada calle estrecha es una aventura.

Se nota el espíritu de la Semana Santa. SALUD.

Visitando otro MARÍA DIE con ANXO

 

Me encantan las pinturas murales urbanas.

MARÍA DIE es una de las mejores artistas andaluzas.

Ya traje su obra del BADULAKE y ahora incorporo la del restaurante AIPORA.

Ojalá SANLÚCAR se llene de más obras maestras. SALUD.

Calle LA MILAGROSA

Es una de la calles más singulares de SANLÚCAR.

Forma parte de la SANLÚCAR profunda.

¿Cómo se ha podido vivir así años y años?

Es un túnel a la intrahistoria sanluqueña.

Parece mentira que en pleno siglo XXI siga existiendo una calle así.

La sabiduría popular se percibe en una simple mirada.

No faltan los perritos.

La pared de los buzones es muy curiosa.

Sus habitantes son muy amables y conversadores.

Tiene su parte laberíntica.

Por la noche no me metería en ella.

Si tienen la oportunidad sumérjanse en ella. SALUD. 

Estrenando Las Piletas con ANXO

 

Después de muchos años hemos podido disfrutar de Las Piletas.

Es una alegría disfrutar de este espacio tan sanluqueño.

Desde 1872, y gracias a FAUSTINO MÍGUEZ, muchas generaciones se beneficiaron de sus aguas medicinales.

El DUQUE DE OSUNA costeó los gastos necesarios para su apertura.

Ojalá que esta apertura de Las Piletas se siga manteniendo mucho tiempo.

Ha sido una buena manera de empezar la primavera. SALUD.