Después de visionados cincuenta y dos capítulos (correspondientes a las temporadas 1, 2, 3 y 4) suscribo que es una de las mejores series de la historia. Aún me quedan dos temporadas más por disfrutar.
Tony Soprano (magistral, James Gandolfini) con su familia de sangre (Carmela Soprano -Edie Falco-, Meadow -Jamie Lynn- y Anthony -Robert Iler-).
Tony Soprano con su otra familia fiel y cercana de New Jersey (Christopher Moltisanti -Michael Imperioli-, Silvio Dante - Steve Van Zandt- y Paulie Walnuts - Tony Sirico-).
La serie es machista, violenta y los tipos son despreciables. Así que si la veis, estáis avisados. Son egoístas, egocéntricos, mirando siempre al beneficio propio.
La psiquiatra de Tony Soprano (Doctora Melfi, Lorraine Bracco) merece su posición con luz propia. Intentará remediar los ataques de pánico y la personalidad depresiva del "jefe". De su sala saldrán los mejores diálogos de la serie.
La serie es un relato "sui generis" -absolutamente maravilloso- del concepto de familia, de sus conflictos y sus lugares comunes. Fueras de sus casas, roban, apalizan, asesinan,..., pero al llegar al hogar, generan auténtica simpatía.
Furio (Federico Casteluccio) es puro amor con Carmela. La condición humana será diseccionada capítulo a capítulo. Veremos y reflexionaremos sobre la familia, la amistad, el matrimonio, el sentido de la vida, la muerte, el honor, la lealtad, la dignidad, la traición, la piedad, el alcohol, el sexo, las drogas, la envidia, la bondad, la corrupción moral, ..., en definitiva, todo lo que compone el ser humano. SALUD.
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