1975. CALI, ciudad colombiana de más de un millón de almas. La banda de los Chemas, liderada por GILBERTO JOSÉ RODRÍGUEZ OREJUELA (El Ajedrecista), MIGUEL ÁNGEL RODRÍGUEZ OREJUELA, y JOSÉ SANTACRUZ LONDOÑO (El Estudiante), se hace con el control de la coca en Cali. Toman el lugar de su predecesor, BENJAMÍN HERRERA ZULETA (Papa Negro de la Cocaína) que es detenido en junio con un enorme cargamento de droga.
Ya en los años noventa, el agente PEÑA (de la DEA), luchará con todas sus fuerzas por acabar con el CARTEL DE CALI. La política internacional entre Colombia y Estados Unidos le pondrá la cosa bastante difícil. Nunca la DEA tuvo un agente como él.
En un negocio que genera 74.500 millones de euros al año no se andan con chiquitas. La violencia campa por sus fueros. La guerra entre todos los clanes es brutal y sanguinaria.
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