Había oído mucho sobre este libro (el asesino de John Lennon, Mark David Chapman, lo citó como explicación de su cruel acto), pero nunca lo tuve entre las manos.
Jerome David Salinger (1919-2010 ) escribe en 1951, una novela única e irrepetible que, en 26 capítulos y 279 páginas, representa el modelo de historia sobre un joven rebelde a camino entre la infancia y el mundo adulto.
Holden Caulfield tiene 16 años y ha sido expulsado por bajo rendimiento de la escuela privada Pencey. Huye sin rumbo fijo (para evitar explicarle a su padre la mala noticia), viviendo en primera persona los aspectos más bajos de la sociedad de posguerra estadounidense.No tiene ilusión por nada, y está convencido de que su paso al mundo adulto es de regresión y no de evolución,idealizando a su hermana pequeña Phoebe, increíblemente sensata para su edad, porque representa la última ramita que une a Holden con su infancia.En definitiva, no sabe lo quiere ni a quién busca.
Holden ama la infancia porque está libre de hipocresía y protocolo. Esto le provoca graves crisis de nostalgia y desilusión contemplativa.
Los diálogos de la obra son fluidos e impresionantes, acercándonos a la personalidad del adolescente, difícil y perdido, que se avergüenza de la multitud de errores y estupideces que comete, su forma de caer en el ridículo, pero viéndose obligado a contar la verdad como purificación, y siendo consciente de lo que le ha supuesto ese camino a ninguna parte, ese conocimiento en primera persona de ciertas características de la sociedad, de su inminente llegada al mundo de los adultos.
Sorprende su conversación con Phoebe, en la que su hermana le pregunta: “¿qué te gustaría ser?” “¿Te acuerdas del poema de Robert Burns ‘Si un cuerpo encuentra a otro cuerpo, cuando van entre el centeno’? [...] Yo sería el guardián entre el centeno. Evitaría que los niños cayeran a un precipicio”.
En la medida que el lector sepa de lo que habla Holden, puede sentirse consternado y golpeado. El antihéroe, lo único que busca es proteger ese mundo infantil donde la felicidad es plena y absoluta, y quiere protegerlo de encontrarse con un mundo hipócrita, malvado y feo.
Estamos ante una obra cumbre de la literatura, que todo adolescente/joven debería leer.SALUD.