Es una obra caleidoscópica sobre la corrupción y los status de poder en Italia, centrada en una cadena de televisión "que antes de dar una noticia tenemos que pensarlo cuatro veces"(6), para evitar molestar a quienes dirigen con mano firme los destinos de la población siciliana ("...¿no sabes que tienes el teléfono pinchado? Como media ciudad, por otra parte"-14-).
La complicada trama tendrá como protagonista-espectador al director de la cadena televisiva, Michele Caruso. "Entonces se había sentido vacío, pero no en el ánimo, sino en el cuerpo, se había convertido en un envoltorio sin nada dentro, sin corazón, pulmones, hígado ni estomágo"(86).
La cuestión será cómo acometer desde los medios de comunicación el asesinato de la hija (Amalia Sacerdote, estudiante de derecho, veintitrés años, y novia de Manlio Caputo desde hacía dos) de un potentado (Nino Sacerdote) a manos del hijo de otro potentado ( diputado Ignazio Caputo). Cambiarán abogados, fiscales, jueces, jefe de la policía como quien está realizando cambios en un equipo deportivo para amañar los partidos. "Era como el ajedrez. En cuanto se movía una pieza, saltaba el contragolpe del adversario. Y no se trataba de jugar con peones, sino de poner en liza torres,alfiles y caballos"(41). La prueba con la que todos juegan serán las cuatro agendas de la asesinada desaparecidas. Todos serán mandados in partibus infidelium para controlar cada movimiento en el campo adversario.
La trágica conclusión del periodista protagonista vendrá dada en forma de consejo paternal:"- Michè, mientras la batalla está en curso, ¿qué hace un soldado raso que se enfrenta en primera línea? Combate, obedeciendo las órdenes que le dan. Pero no entiende nada ni sabe nada de la estrategia del mando supremo, sólo sabe que con sus compañeros debe conquistar una determinada colina e intenta hacerlo. Así eres tú. Has hecho lo que te han dicho y..."(166).
Ejecutores:
* Ignazio Caputo, político camaleónico, tres veces diputado por el partido socialista hasta que los jueces milaneses echaron a pique su partido. "Pero sus electores lo seguirían votando aunque se convierta en monárquico o comunista. Poseía tal cantidad de tierras que él mismo se definía en broma, pero no tanto, como el último latifundista"(24).
* Manlio Caputo, hijo de Ignazio Caputo, acusado de matar a Amalia Sacerdote.
* Antonio Sacerdote, el secretario en jefe de la asamblea regional. "...¿por qué el padre de la joven asesinada contrata a un abogado que es uña y carne con el padre del joven sospechoso de ser el asesino?"(167).
* Gaetano Stella, poderoso senador, de la Democracia Cristiana. "Porque eso es la política. Fumarte un cigarillo que no te apetece porque no quieres, o no tienes fuerzas, de decirle que no a quien te lo ha ofrecido"(97).
* Filippo Portera, el capo, hermanastro de Antonio Sacerdote. "¿Cómo, tiene en la mano un Kaláshnikov, que sería Posateri, lo tira y coge un fusil, que sería Troina? No hay ninguna explicación lógica para este cambio."(166).
Títeres:
* Alfio Smecca, redactor jefe y presentador del telediario regional vespertino.
* Caterina Longano, la secretaria, cincuentona gorda y sudorosa, soltera con madre a cargo, buenísima, en su oficio. Verdadera mina de chismes, habladurías y maledicencias.
* Gilberto Mancuso, presentador del último telediario, una persona con la cabeza en su sitio, ni una palabra de más ni de menos.
* Basurto, abogado, al que no se le podía llevar la contraria.
* Giulia, hija del senador, el omnipotente Gaetano Stella. Casada y separada de nuestro protagonista, el periodista Michele Caruso. "Para no perjudicar a su padre, ¿era mejor tener un amante que divorciarse? (22).
* Massimo Troina, un abogado de éxito que empezaba a hacer política a la sombra del senador Gaetano Stella. Nuevo amante de la ex de Michelle Caruso.
* Gabriele Lamantia, infame, gorrón, capaz de inventarse las cosas más increíbles sobre una persona e ir propagándolas como verdades del evangelio.
* Corradino Scimona, el presidente del Banco de la Isla. "Había hecho una carrera a marchas forzadas en el mundo de las finanzas sicilianas, y a los cuarenta y siete años parecía haber alcanzado una posición en la que podía dormir tranquilo"(70).
* Mario Filippone, diputado regional cuarentón, del mismo partido que el senador, pero su encarnizado adversario. En resumen, aspiraba a la sucesión y no lo ocultaba. "Desprejuiciado, hábil e inteligente, ya eran muchos los que apostaban por él"(104).
* Giuditta, mujer de Alfio, amante de Michele, "...tenía el mismo sentido del honor que un mejillón"(105).
* Di Blasi, magistrado dimisionario por "presiones fácticas".
En definitiva, nueva aportación del lúcido Camilleri a la visión geoestratégica sobre la organización mafiosa de la sociedad y política italianas. SALUD.
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