lunes, 7 de julio de 2014

Belleza y gratitud (José Prado y Galicia)


Pocos fotógrafos captan la belleza de su tierra como Nika (José Prado).


¿No es la vida en el tiempo, en su espléndida gratuidad, un sueño al fin y al cabo?


¿Es posible que despertemos, reconociéndolo como tal, al fraternal desapego, a esa lucidez insobornable del amor, a la belleza dada?



La auténtica religiosidad sólo puede ser el fruto de la extrema pobreza, la que nada ambiciona, la que nada se arroga, la que sabe sin saber y hace de la eterna desposesión su morada de alegría.


                      A veinticuatro horas para partir hacia Galicia, me has emocionado.


¿No merece la pena apartar cuanto damos por sabido y echar un vistazo inmediato aquí, en nosotros mismos?


Desapego, desprendimiento, anonadamiento sin un ápice de apatía o indiferencia.


El primer asomo de sabiduría consiste en confesarnos que no sabemos nada en absoluto.


Y esta gran cerveza ayuda a la lucidez. SALUD.

No hay comentarios:

Publicar un comentario