Cuarta entrega del comisario Salvo Montalbano - véase en este blog
"La forma del agua","El perro de terracota" y "El ladrón de meriendas"-.
Un violín Andrea Guarnieri - muy fácil de identificar por el barniz de color ámbar que le confiere una extraordinaria luminosidad - será el gran protagonista de esta novela. Se producirán un asesinato brutal (Michaela Licalzi), una muerte accidental (Maurizio Di Blasi) y un suicidio (Guido Serravalle).
Montalbano con su escepticismo, ironía y melancolía dará con las claves que resolverán el enigma. Pero antes será hasta apartado del caso, en favor del advenedizo Panzacchi quien meterá la pata, bien metida - sus hombres matarán a un hombre inocente y desarmado -. Transitando los límites de la legalidad, como es su costumbre, Montalbano ha de relacionarse y pactar con los elementos más indeseables y abyectos del hampa, iniciando un viaje a lo más oscuro del alma humana, en el fondo, su territorio predilecto.
Como viene siendo habitual en sus obras, Andrea Camilleri nos hará gozar del paladar, de lecturas interesantes y de las peculiaridades humanas:
Platos Nuevos:
* ensalada de anchoas frescas aliñadas con mucho zumo de limón, aceite de oliva y pimienta negra recién molida;
* caponata con apio, berenjenas, aceitunas, alcaparras y tomate;
* macarrones con una salsita llamada "fuego vivo" (sal, aceite de oliva, ajo y mucha guindilla);
* los cannoli recién hecho (rellenos de requesón, cacao, cortezas de limón y naranja confitada); y esas dos rebanadas de pan de trigo con aceite de oliva, sal, pimienta negra y queso de oveja ("se sintió rejuvenecer cuarenta años y volvió a ser un chiquillo, pues era el mismo pan que le preparaba su abuela"- pág. 115 -).
Lecturas interesantes:
* Obra completa del escritor argentino
MARCO DENEVI.
Personajes especiales:
* Clementina Vasile Cozzo ("era una anciana paralítica, una ex maestra de escuela primaria extremadamente inteligente y dotada de una natural y comedida dignidad. Aquella mujer era la que habría querido tener como madre, pues la suya la había perdido siendo muy chico y sólo conservaba de ella el recuerdo de una dorada luminiscencia"- pág. 25 -);
* Cataldo Barbera ( maestro internacional de violín, brillante concertista y con una enfermedad cuelmente degenerativa );
* Anna Tropeano ( mujer fuerte que le había caído bien nada más aparecer y de la que huirá para no poner en peligro su relación con Livia );
* Orazio Guttadauro ( polémico penalista, defensor de todos los mafiosos de la provincia y también de fuera de la provincia ); y sobre todos ellos, la figura de
* François ( el niño de la novela anterior y que iban a adoptar pero que será afectivamente imposible ). "El niño François había echado férreas raíces en casa de los Gagliardo con los otros dos chiquillos (Giuseppe y Domenico). No se puede prescindir de sus sentimientos. Montalbano comprendió que jamás de los jamases tendría el valor de provocarle otro trauma a François. No tenía derecho a hacerlo. Y Livia tampoco" -pág. 123-.
En resumidas cuentas, lectura ideal para olvidarte de los problemas cotidianos, trasladarte mentalmente a Sicilia, y compartir experiencias, con este comisario tan especial. SALUD.
P.D. A destacar el alto concepto que Andrea Camilleri tiene sobre la mujer ("Por un instante, Montalbano, se conmovió. La ancha pelvis. Aquella extraordinaria capacidad femenina de comprender profundamente y penetrar en los sentimientos, de ser simultáneamente madre y amante, hija y esposa"-pág. 89-).
L
