sábado, 30 de julio de 2011
Galicia acogedora (3ª Semana)
Semana muy intensa con visitas a Miño (Praia Grande), a las Islas Cíes (otro paraíso terrenal) y a Santiago, para el concierto del grupo musical Vetusta Morla (debo ponerme al día). Sigo llevando a la práctica la frase marxista de "comer el pan y beber el vino de cada país". Así estoy ganando peso, minuto a minuto. Por cierto, extraordinaro godello "As Chas", por menos de 3 euros la botella. Calidad y buen precio.
Los pensamientos van y vienen. Ya he comprendido que aquellos que han ideado el expediente, necesitan odiarme para ser ellos mismos. Es duro darse cuenta de hasta donde puede llegar la maldad humana. Resulta evidente que el saber es inútil, y jamás ayuda a superar la sensación de estafa que implica el fracaso, la humillación y la muerte.Menos mal que una simple cervecita 1906, una buena tapa de bacalao a la gallega, y un trozo de pan (de aquí, por supuesto), te devuelven a la alegría de vivir.Sed felices.SALUD.
domingo, 24 de julio de 2011
Galicia acogedora (2ª Semana)
Con la llegada del Sol, Galicia nos brinda la inmensa posibilidad de visitar sus magníficas playas. Cabío, Coroso y mi preferida, playa del Vilar, con su agua muy fría, te "quitan tó"( malos humores, pensamientos negativos, preocupaciones,...).La vida se ve de otra manera. No miento cuando digo que te unen a la Naturaleza con mayúscula. Hoy a mis 47 años, he aprendido a comer percebes, en la feria de Aguiño. Ha supuesto una experiencia nueva, de sabor intenso a mar. Para acompañar, ni ribeiro ni albariño, un blanco Valdeorras, A Rúa (90 puntos en la guía Parker)a 1,5 euros. ¡ Increíble pero cierto! La elevada puntuación fue anunciada hace unos días por el enólogo Julio Ricarte, de la bodega cooperativa de Virgen de las Viñas, que aglutina a 600 socios.Me encanta que unos cooperativistas le ganen en calidad a ciertos empresarios vitivinícolas -ávidos de ganancias privadas-.Ojalá cunda el ejemplo del cual se beneficiarían todos los amantes del buen vino que no somos ricos.SALUD.
P.D. Poco a poco voy reponiendo fuerzas para el durísimo curso que me espera, a partir de septiembre.Sigo teniendo en mi corazón y en mi memoria, cada día que pasa, la solidaridad que han mostrado tantas personas conmigo. Deseo fervientemente que estéis pasando un verano gozoso.SALUDOS.
sábado, 23 de julio de 2011
Lectura Recomendada: "Cómo nos venden la moto" de Noam Chomsky e Ignacio Ramonet
Con mucho atraso (mea culpa) ha llegado a mis manos este demoledor libro del dúo Chomsky-Ramonet. Debo reconocer que durante su lectura no he dejado de reflexionar, extrapolando lo que me ha sucedido con el expediente, llegando a la misma conclusión que los autores, pero a otro nivel: lo que importa es el control de los medios. Es lo que he sufrido en mis carnes procedente de ese sector al que llamo "del odio enconao"( manejan los medios de poder como director, jefe de estudios, coordinador programa Comenius, orientadora, junta directiva del AMPA, liberado sindical e inspector de zona). Dominan los medios del "pensamiento único" y terminarán con toda disidencia.
Pero vayamos al libro en sí mismo, y, a su máxima "enjundia".
Los políticos, y el poder en general, necesitan algo que sirva para domesticar al rebaño perplejo de ciudadanos: es la fabricación del consenso.Es la forma en que la clase dominante trata de hacer tolerable la realidad."Al rebaño habrá que distraerlo y hacer que dirija su atención a cualquier cosa: para ello está la propaganda que viene a ser en la democracia lo que la cachiporra era en el Estado totalitario".Chomsky nos recuerda que los EEUU crearon la industria de las relaciones públicas para conseguir el objetivo de "controlar a la opinión pública". Visionaria su idea de la democracia: la de un sistema en el que la clase especializada está entrenada para trabajar al servicio de los amos de la sociedad. Realmente, nos han convertido en meros consumidores, cada vez más y mejores derrochadores.
Ignacio Ramonet (de quien ya he recomendado varias obras) vuelve a iluminarnos sobre esa vigilancia (mi expediente sería un claro ejemplo) a todo razonamiento rebelde, por parte de una sola doctrina, la del pensamiento único, autorizada por una invisible y omnipresente policía de la opinión. Los mandamientos de este pensamiento único serían, a saber:
* traducción a términos ideológicos de los intereses del capital internacional.
* lo económico prima sobre lo político.
* los mercados económicos orientarán la vida en general.
* la división internacional del trabajo modera las reivindicaciones sindicales y abarata los costes salariales.
* disminuir el Estado a su mínima expresión.
* repetición constante en los medios de comunicación del mismo mensaje intimidatorio.
* terminar con cualquier resistencia y disidencia. TODO EL PODER PARA EL MERCADO.
Concluyo: soplo de aire fresco en mundo cada vez más desorientado y que no sabe cómo encausar estas graves crisis económica e ideológica. SALUD.
P.D. Ramonet dedica varias páginas a demostrar que nuestros niños antes de los doce años habrán visto más de 100.000 anuncios que les van a inculcar la ideología dominante, que las diversiones electrónicas les permitirán eliminar a más de 40.000 adversarios "virtuales" (matar, destruir, fusilar son acciones constantes),..., y a mí me sancionan con siete días de empleo y sueldo, por mandar cuatro cartas para intentar salvar vidas en colaboración con Amnistía Internacional. ¿Quién está educando mejor? ¿Para qué tipo de Administración estamos trabajando? Perdónenme, pero a veces, no sabe uno lo que pensar.
jueves, 21 de julio de 2011
Galicia acogedora (1ª Semana)
Galicia nos ha recibido con su clima especial, con temperaturas suaves (para ser verano), muchas nubes y lluvias intermitentes. Aunque no se pueda ir a la playa, permite ponerte al día en las lecturas atrasadas. Eso sí, ya empieza uno a engordar, hasta el pan solo está de muerte. Será irremediable volver a Sanlúcar con más de 80 kilos. ¡Con lo que cuesta después quitárselos!
Después de tan malos momentos supone una catarsis total venir a la tierra de mi extraordinaria compañera, Celia.SALUD.
P.D. Recomiendo las dos obras de John Verdon: "Sé lo que estás pensando" y "Abre los ojos", publicados en Rocaeditorial. Thrillers inquietantes y que te hacen pensar. Crean adicción.
martes, 12 de julio de 2011
318 veces GRACIAS
lunes, 11 de julio de 2011
jueves, 7 de julio de 2011
miércoles, 6 de julio de 2011
Nueva amenaza contra la libertad de expresión: burofax.
Los firmantes quieren que borre las entradas en las que simplemente transcribí (el escaneo no cambia ni una coma ) sus declaraciones, en contra de mi persona. En este espacio personal (nadie está obligado a entrar, es como mi "diario íntimo" que comparto con quien quiera) puedo (hasta que un juez diga lo contrario) publicar todo lo que me afecte. Las declaraciones de los firmantes del burofax, me han afectado y mucho. La transparencia, por mi parte, ha sido inmaculada (expongo los documentos tales cuales, sin comentarios).¿Dónde está lo ilegal?¿Será quizás que he demostrado el "odio enconao" que me tenéis? Posiblemente. SALUD.
martes, 5 de julio de 2011
40 preguntas que siguen sin responderse
1. ¿Dónde están los famosos 15586,32 euros sin justificar?
2. ¿Es lícito invitar a comer a costa del contribuyente?
3. ¿No es despilfarrar dar un dinero público (75000 euros) por firmar un papel e ir a trabajar como cualquier maestro?
4. ¿Cuánto habéis ganado con los cursos del CEP que tanto proliferan en nuestro centro últimamente?
5. ¿ Por qué nunca defendisteis con tesón las 16 medidas aprobadas por el Consejo Escolar hace cuatro años para la verdadera mejora del sistema educativo?
6. ¿Por qué aprobasteis el Plan de Calidad donde no aparece ninguna de las medidas aprobadas en aquel Consejo?
7. ¿ No creéis que en cuanto entró el dinero fácil por la puerta, salieron los ideales por la ventana?
8. ¿ Por qué habéis incumplido muchas de las cincuenta propuestas que llevaba en su programa para conseguir la Dirección, vuestro anterior compañero en el equipo directivo?
9.¿Cómo se puede entender su excesivo autoritarismo que muestra –a veces y sólo con ciertas personas -?
10. ¿Recuerda el caso omiso a mi petición de ayuda al encontrarme sólo en el patio durante el recreo (existe escrito documental del 7-5-07)?
11. ¿ Por qué mostráis tan poca combatividad ante la elevada ratio del centro?¿Será porque no impartís veintidós horas lectivas con niños?
12. ¿Por qué tuvo a la Comisión de Convivencia sin convocar un año entero y ahora la convoca a cualquier hora sólo para hablar mal de mi persona?.
13. ¿Qué queda de la dimisión que presentó vuestro equipo directivo hace dos cursos, que fue un insulto a todos los compañeros del centro?
14. ¿Hasta dónde llegará vuestra red de informadores propia de otros tiempos, que dominan hasta las charlas de pasillos, bocadillos, patio,…?
15. ¿ Quién va a criticar la gestión de nuestro director cuando el complemento del Plan de Calidad depende de su conformidad?
16. ¿Por qué le trae sin cuidado la asignatura de Ética – la mal llamada Complementaria a la Religión- impidiendo la preparación adecuada de quien quiera impartirla adecuadamente?
17. ¿Por qué amenazáis con los Tribunales de Justicia por emplear la libertad de expresión en mi blog personal?
18. ¿Por qué castigó durante un año a las niñas del equipo de fútbol sala sin equipación oficial por no estar inscritas en el Programa Deporte en la Escuela? Prefirió junto a vuestro director que permanecieran en la caja un año sin usar aunque la necesitaba un grupo de alumnas, que por primera vez competían por nuestro colegio. Así entiende la utilización del dinero público: hacer y deshacer a su antojo.
19. ¿Qué hay detrás de su afán por defender el monopolio de ANAYA?
20. ¿Está orgulloso del linchamiento moral que hizo a mi persona el 1 de septiembre de 2010?
21. ¿Se siente tan sabio y experimentado, hasta el punto de calificar a otra persona con más experiencia, como incompetente para ejercer una tutoría?
22. ¿Por qué nadie se preocupó del daño psicológico que estaba sufriendo el profesor D. Antonio Ferreira Lobato (quien ya se ha liberado al haber sido jubilado) por la manera de ejercer el poder del anterior equipo directivo? Recuerdo que dos de ellos, ocupan actualmente la dirección y la jefatura de estudios.
23. ¿Ha tratado alguna vez la Comisión de Convivencia los daños psicológicos que ha recibido la profesora Doña Marisa Montalvillo en esas reuniones a puertas cerradas, en el despacho de dirección?
24. ¿Me ha escuchado alguna vez, en todas mis críticas al anterior equipo directivo (véase blog que demuestra la razón que llevaba en mis 44 razones para cambiar de director) y en las susodichas al actual equipo?
25. ¿Creen que es fácil convivir en este acoso constante?
26. ¿Por qué a mi se me puede chillar en un claustro , impidiéndome utilizar mi turno de palabra? ¿Ese es su sentido de la justicia? Le diré una cosa:prefiero sufrir una injusticia a cometerla. Y usted la está cometiendo conmigo.
27. ¿Quién se hace responsable de los daños causados a mi coche y a mi bicicleta?¿Quién pide disculpas a la madre agredida en el centro el día 31 de marzo?
28. ¿Consideráis un éxito el 3,9 (después convertido por arte de magia en un 4,4) la nota del Plan de Calidad?
29. ¿Estáis orgulloso de borraros de la Red Internacional de Centros en Defensa por los Derechos Humanos?
30. ¿Para qué tantos viajes con el Comenius si lo más importante no os interesa?¿No se estará convirtiendo en una agencia de viajes financiada con los impuestos de los demás?
31. ¿Por qué se abandonó la web antigua del centro un 25 de enero del 2010?
32. ¿Por qué no se siguió trabajando en ella hasta final de curso?
33. ¿Por qué en cambio su administrador siguió impartiendo cursos TIC para el CEP de Jerez?¿Tanto se gana con esos cursos?
34. ¿No pudo dejarle la administración a otra persona?
35. ¿Hay una relación de beneficio económico para dejar lo que no aporta dinero (web del centro), y continuar con lo que deja buenos beneficios (cursos del CEP)?
36. ¿Cuánto ha costado la nueva web del centro?
37. ¿Por qué se encargó a la empresa de su cuñado cuando existen otras?
38. ¿Es la página web oficial del centro, pública o privada?
39. ¿Por qué no se admiten más blogs educativos que los que desea el administrador?
40. ¿Es dicho Administrador, el nuevo señor todopoderoso, que va a "dictar su Ley", va a "hacer sus negocios", y , va a "discriminar a quien quiera"?
P.D. Si me respondierais a estas preguntas, daría por buenos los dos meses de sanción , de empleo y sueldo. Todo sea por aclarar la verdad de las cosas. Ánimo y responderme, por favor.
lunes, 4 de julio de 2011
Artículo interesante
ESCUELA HIPERACTIVA Junio de 2.011
No toda la memoria que atesoramos está activa. Hay una parte, la menos funcional, que se agazapa en nuestro inconsciente dormido y descansa allí sin desaparecer. Esto es un hecho científico bien conocido y que motiva, por ejemplo, toda la terapia psicoanalítica de la introspección. Sin embargo, sin necesidad de recurrir al buceo clínico, esta memoria antigua y dormida, también se nos revela con la complicidad de la edad. Se sabe que en la vejez se debilitan las memorias de corto y medio plazo, dejando aflorar recuerdos lejanos que ni siquiera se tenían por vividos. Yo estoy llegando a esa edad provecta en la que me empiezan a llegar mensajes del pasado que, bien por despreocupación biográfica, bien por desconocimiento, en todo el tramo afanoso de mi vida no había advertido o ignoraba.
Una de esas improntas resucitadas es la experiencia de mi etapa escolar. La experiencia, realmente, fue corta porque apenas estuve tres años, pero rememoro de ella un tiempo de recogimiento con mi maestra, en un ambiente sereno que no era perturbado por nada ni por nadie externo al aula. Entrar en clase tenía el mismo sentido que acceder a un santuario, con su dimensión de paz y silencio que vivíamos, a partes iguales, alumnos y profesora, sin ruidos ni otros intrusismos. Sólo recuerdo ventanas abiertas, zumbidos de insectos , cantos de pájaros y el perfume de mi maestra. Teóricamente sé que el protocolo de mi época exigía levantarse cuando alguien visitaba el aula, pero no recuerdo haberlo hecho nunca. Tal era la importancia que se daba a la limitación de estímulos espurios para favorecer la concentración académica.
Hoy, en las aulas del siglo XXI, se ejerce la antítesis perfecta de aquella escuela de mi infancia. Es tal el bullicio interior y exterior (colegio entero) que difícilmente se dispone de una pausa para el reposo reflexivo, en la inmensa mayoría de la práctica educativa pública que conozco -la privada la desconozco-. Enumero algunos de los lances habituales y cotidianos:
Alumnos que acuden excitados desde el inicio del día. Padres que los escoltan desde la fila hasta dentro del aula. Padres pululando masivamente por el Centro a primera hora y presentes a cualquier hora del día y lugar. Griterío intemperante de los alumnos cada vez que recorren los espacios comunes. Imposibilidad del profesor para imponer, individualmente, hábitos de conducta comedidos, sin leyes institucionales que lo respalde ni plan orgánico que lo auspicie. Pupitres deshabitados buena parte de la jornada, con sus ocupantes orbitando o desorbitando por la clase, en proceder errático. Materiales didácticos maltratados y presentación descuidada del trabajo escolar, sin solución de continuidad en la cultura del esmero, porque el tiempo necesario para el primor se invierte en interactuar con todo el entorno. Despilfarro de medios, sin réditos alícuotos al gasto en fotocopias y fungibles que se les proporcionan a los alumnos. Absentismo e impuntualidad sostenidas por las leyes administrativas (los Servicios Sociales no pasan de una amenaza retórica, puesto que ellos tampoco disponen de medidas disuasorias contundentes). Rosario de fiestas, celebraciones y viajes, que deja exhausto al profesorado y, a estas alturas, causan poca mella en los niños, precisamente, por su carácter reiterado. Sucesión, hora sí, hora no, de especialistas que alternan sus distintos esquemas pedagógicos. Y, como sucede en las escuelas bilingües, profesores adjuntos de inglés que desarrollan media asignatura del Conocimiento del Medio y de las Matemáticas; sin olvidar a los lectores extranjeros que, igualmente, se cuelan en el aula. Para rematar la campaña de enajenación oficializada, el allanamiento del aula con maestros de apoyo, de Pedagogía Terapéutica y otros por añadir. Cada cual con su maniobra particular. Un verdadero camarote de los hermanos Marx.
En definitiva, un torbellino de estímulos incontrolados que dañan, no sólo el proceso de enseñanza-aprendizaje, sino los recursos cognitivos mismos del alumno; ya que, hay que mencionarlo, la inteligencia se mide básicamente por tres capacidades, a saber: lenguaje, memoria y atención. Quién demonios puede abstraerse de ese circo de distracciones que es hoy el aula y, por ende, la escuela. Los niños que son capaces de marginar un porcentaje de estímulos extraños, tienen más papeletas para salir adelante, pero nunca con el máximo de su rendimiento real. Yo mismo hubiera fracasado en un sistema semejante. Respondo a una personalidad biológica “en alerta”, que me impide el aislamiento completo; es decir, cerrar mis canales sensoriales a voluntad. Como no lo puedo hacer desde dentro, necesito que se provea desde fuera las condiciones de silencio y quietud que requiero para concentrar mi atención. Imagino que lo que me pasa a mí, es un patrón bastante compartido por la biología humana. La prueba es que en las bibliotecas se ha exigido inveteradamente mutismo absoluto. Aunque ya llegará algún pedagogo clarividente que predique que las bibliotecas deben sembrarse de dinamismo para sacarlas de su aburrimiento clásico. Al tiempo.
Alguien puede criticarme que la escuela de mi tiempo era una tumba y que reprimía el pálpito inquieto de la infancia, pero hay que recordar que una escuela, por definición, es un espacio de formación intelectual y física. Eso, o se hace en el sosiego, o no hay tal.
En cualquier caso, la escuela de hoy no está en el equilibrio equidistante; está instalada, por el contrario, en el extremo exaltado. Es una escuela TDHA (hiperactiva y con déficit de atención). Y no hablo del porcentaje creciente de este trastorno entre los alumnos, hablo del sistema escolar entero, por culpa de la condensación funcional, por un lado, y la diseminación de los límites educativos, por otro.
Tutor es quien personaliza una tutela. Pero en la escuela que tenemos, el tutor pierde esta valoración en favor de algo cercano a “encargado”. Apodera al alumno y lleva el creciente papeleo que cada uno genera. Registros (físicos e informáticos) y a distintos niveles; evaluaciones duplicadas; informes de diferente laña; protocolos; programas de sondeo que anexan su correspondiente asiento de marcas y puntuaciones en el expediente; adaptaciones curriculares, en los casos que procede; programación de aula, de ciclo; planes específicos; proyectos institucionales, proyectos pedagógicos (intercentros, de Centro, de maestro con su aula, de maestro con un grupito, de maestro con un niño -esto último no me consta todavía, aunque la tendencia se apunta-)…
El tutor, también imparte enseñanza, claro, pero su cabeza no está centrada en su aula. Tiene que vagar por las sustituciones o los apoyos que le toca, el papeleo citado, la coordinación con el ingente equipo docente, las actividades no curriculares propias, inducidas o compartidas, otras responsabilidades del Ciclo y del Centro, intercambios de aula, presentación (no representación) en algún órgano colegiado, coordinación o miembro de un grupo de trabajo, coordinación o miembro de un proyecto, memorias, autoformación, etc.
Por otra parte, está el organigrama del Centro junto a una procelosa clasificación técnica de personajes y responsabilidades. Sólo con el mal llamado Plan de Atención a la Diversidad, hace falta un mapa conceptual y un vocabulario “ad hoc” para desembrollar semejante galimatías. En fin, un diseño folletoso de principio a fin.
Sin embargo, la materia prima de una escuela son los niños. Y enseñar a un niño es menos complicado que la burocracia que, involuntariamente, crea ese niño, merced a la desbocada incontinencia de los tecnócratas educativos y el quimérico arquetipo de escuela que perpetran.
La premio nobel Wangari Maathai (doctor en Biología) tuvo su escuela debajo de un baobab, en su Kenia natal. Ese fue, sin duda, el origen de la escuela: alguien, a la sombra protectora de un árbol, transmitía a los convecinos sus descubrimientos sobre el medio natural. La escuela debe ser sencilla, los saberes es lo único que pueden ser complejos. Por el contrario, en la enseñanza que tenemos hoy, los saberes rebajan su complejidad en la medida que se complica la escuela. Se aprende poco pero se mueve demasiado. Pues eso, TDHA.
Paco Botella. CEIP “Cardenal Belluga”. Motril
No toda la memoria que atesoramos está activa. Hay una parte, la menos funcional, que se agazapa en nuestro inconsciente dormido y descansa allí sin desaparecer. Esto es un hecho científico bien conocido y que motiva, por ejemplo, toda la terapia psicoanalítica de la introspección. Sin embargo, sin necesidad de recurrir al buceo clínico, esta memoria antigua y dormida, también se nos revela con la complicidad de la edad. Se sabe que en la vejez se debilitan las memorias de corto y medio plazo, dejando aflorar recuerdos lejanos que ni siquiera se tenían por vividos. Yo estoy llegando a esa edad provecta en la que me empiezan a llegar mensajes del pasado que, bien por despreocupación biográfica, bien por desconocimiento, en todo el tramo afanoso de mi vida no había advertido o ignoraba.
Una de esas improntas resucitadas es la experiencia de mi etapa escolar. La experiencia, realmente, fue corta porque apenas estuve tres años, pero rememoro de ella un tiempo de recogimiento con mi maestra, en un ambiente sereno que no era perturbado por nada ni por nadie externo al aula. Entrar en clase tenía el mismo sentido que acceder a un santuario, con su dimensión de paz y silencio que vivíamos, a partes iguales, alumnos y profesora, sin ruidos ni otros intrusismos. Sólo recuerdo ventanas abiertas, zumbidos de insectos , cantos de pájaros y el perfume de mi maestra. Teóricamente sé que el protocolo de mi época exigía levantarse cuando alguien visitaba el aula, pero no recuerdo haberlo hecho nunca. Tal era la importancia que se daba a la limitación de estímulos espurios para favorecer la concentración académica.
Hoy, en las aulas del siglo XXI, se ejerce la antítesis perfecta de aquella escuela de mi infancia. Es tal el bullicio interior y exterior (colegio entero) que difícilmente se dispone de una pausa para el reposo reflexivo, en la inmensa mayoría de la práctica educativa pública que conozco -la privada la desconozco-. Enumero algunos de los lances habituales y cotidianos:
Alumnos que acuden excitados desde el inicio del día. Padres que los escoltan desde la fila hasta dentro del aula. Padres pululando masivamente por el Centro a primera hora y presentes a cualquier hora del día y lugar. Griterío intemperante de los alumnos cada vez que recorren los espacios comunes. Imposibilidad del profesor para imponer, individualmente, hábitos de conducta comedidos, sin leyes institucionales que lo respalde ni plan orgánico que lo auspicie. Pupitres deshabitados buena parte de la jornada, con sus ocupantes orbitando o desorbitando por la clase, en proceder errático. Materiales didácticos maltratados y presentación descuidada del trabajo escolar, sin solución de continuidad en la cultura del esmero, porque el tiempo necesario para el primor se invierte en interactuar con todo el entorno. Despilfarro de medios, sin réditos alícuotos al gasto en fotocopias y fungibles que se les proporcionan a los alumnos. Absentismo e impuntualidad sostenidas por las leyes administrativas (los Servicios Sociales no pasan de una amenaza retórica, puesto que ellos tampoco disponen de medidas disuasorias contundentes). Rosario de fiestas, celebraciones y viajes, que deja exhausto al profesorado y, a estas alturas, causan poca mella en los niños, precisamente, por su carácter reiterado. Sucesión, hora sí, hora no, de especialistas que alternan sus distintos esquemas pedagógicos. Y, como sucede en las escuelas bilingües, profesores adjuntos de inglés que desarrollan media asignatura del Conocimiento del Medio y de las Matemáticas; sin olvidar a los lectores extranjeros que, igualmente, se cuelan en el aula. Para rematar la campaña de enajenación oficializada, el allanamiento del aula con maestros de apoyo, de Pedagogía Terapéutica y otros por añadir. Cada cual con su maniobra particular. Un verdadero camarote de los hermanos Marx.
En definitiva, un torbellino de estímulos incontrolados que dañan, no sólo el proceso de enseñanza-aprendizaje, sino los recursos cognitivos mismos del alumno; ya que, hay que mencionarlo, la inteligencia se mide básicamente por tres capacidades, a saber: lenguaje, memoria y atención. Quién demonios puede abstraerse de ese circo de distracciones que es hoy el aula y, por ende, la escuela. Los niños que son capaces de marginar un porcentaje de estímulos extraños, tienen más papeletas para salir adelante, pero nunca con el máximo de su rendimiento real. Yo mismo hubiera fracasado en un sistema semejante. Respondo a una personalidad biológica “en alerta”, que me impide el aislamiento completo; es decir, cerrar mis canales sensoriales a voluntad. Como no lo puedo hacer desde dentro, necesito que se provea desde fuera las condiciones de silencio y quietud que requiero para concentrar mi atención. Imagino que lo que me pasa a mí, es un patrón bastante compartido por la biología humana. La prueba es que en las bibliotecas se ha exigido inveteradamente mutismo absoluto. Aunque ya llegará algún pedagogo clarividente que predique que las bibliotecas deben sembrarse de dinamismo para sacarlas de su aburrimiento clásico. Al tiempo.
Alguien puede criticarme que la escuela de mi tiempo era una tumba y que reprimía el pálpito inquieto de la infancia, pero hay que recordar que una escuela, por definición, es un espacio de formación intelectual y física. Eso, o se hace en el sosiego, o no hay tal.
En cualquier caso, la escuela de hoy no está en el equilibrio equidistante; está instalada, por el contrario, en el extremo exaltado. Es una escuela TDHA (hiperactiva y con déficit de atención). Y no hablo del porcentaje creciente de este trastorno entre los alumnos, hablo del sistema escolar entero, por culpa de la condensación funcional, por un lado, y la diseminación de los límites educativos, por otro.
Tutor es quien personaliza una tutela. Pero en la escuela que tenemos, el tutor pierde esta valoración en favor de algo cercano a “encargado”. Apodera al alumno y lleva el creciente papeleo que cada uno genera. Registros (físicos e informáticos) y a distintos niveles; evaluaciones duplicadas; informes de diferente laña; protocolos; programas de sondeo que anexan su correspondiente asiento de marcas y puntuaciones en el expediente; adaptaciones curriculares, en los casos que procede; programación de aula, de ciclo; planes específicos; proyectos institucionales, proyectos pedagógicos (intercentros, de Centro, de maestro con su aula, de maestro con un grupito, de maestro con un niño -esto último no me consta todavía, aunque la tendencia se apunta-)…
El tutor, también imparte enseñanza, claro, pero su cabeza no está centrada en su aula. Tiene que vagar por las sustituciones o los apoyos que le toca, el papeleo citado, la coordinación con el ingente equipo docente, las actividades no curriculares propias, inducidas o compartidas, otras responsabilidades del Ciclo y del Centro, intercambios de aula, presentación (no representación) en algún órgano colegiado, coordinación o miembro de un grupo de trabajo, coordinación o miembro de un proyecto, memorias, autoformación, etc.
Por otra parte, está el organigrama del Centro junto a una procelosa clasificación técnica de personajes y responsabilidades. Sólo con el mal llamado Plan de Atención a la Diversidad, hace falta un mapa conceptual y un vocabulario “ad hoc” para desembrollar semejante galimatías. En fin, un diseño folletoso de principio a fin.
Sin embargo, la materia prima de una escuela son los niños. Y enseñar a un niño es menos complicado que la burocracia que, involuntariamente, crea ese niño, merced a la desbocada incontinencia de los tecnócratas educativos y el quimérico arquetipo de escuela que perpetran.
La premio nobel Wangari Maathai (doctor en Biología) tuvo su escuela debajo de un baobab, en su Kenia natal. Ese fue, sin duda, el origen de la escuela: alguien, a la sombra protectora de un árbol, transmitía a los convecinos sus descubrimientos sobre el medio natural. La escuela debe ser sencilla, los saberes es lo único que pueden ser complejos. Por el contrario, en la enseñanza que tenemos hoy, los saberes rebajan su complejidad en la medida que se complica la escuela. Se aprende poco pero se mueve demasiado. Pues eso, TDHA.
Paco Botella. CEIP “Cardenal Belluga”. Motril
domingo, 3 de julio de 2011
40 años sin él
Hace unos años tuve la fortuna de visitar en París, la tumba de Jim Morrison, en el cementerio de Pere-Lachaise. Le dejé dos mecheros (siguiendo la tradición de millones de visitantes): uno de Sanlúcar de Barrameda, y otro, del Camino de Santiago. Hoy, 3 de julio, se cumplen 40 años de la muerte de una persona que no dejó indiferente a nadie.Una auténtica leyenda de aire fresco en un mundo cada día más corrupto. SALUD.